Las tres etapas del diseño

Cuando se recurre a los servicios de profesionales de la arquitectura, el diseño encargado pasa por un proceso de crecimiento progresivo desde las primeras ideas hasta tener toda la información necesaria para una obra previsible.

Este camino es habitualmente dividido en tres etapas con requisitos a cumplir en cada una de ellas, facilitando el que puedan ser contratadas por separado y que de ser necesario el proceso pueda ser suspendido temporalmente o continuado por un equipo distinto.

Croquis preliminares

Equivale al conjunto de los dibujos o esquemas necesarios para transmitir las ideas generales del proyecto, algo fundamental para poder tomar decisiones sobre organización de espacios de acuerdo a usos, forma y proporciones. Durante esta etapa del diseño, la cantidad de material gráfico entregado depende de las características del proyecto pero en esta etapa es habitual que se presenten dos o tres opciones posibles para compararlas y elegir la preferida.
Las decisiones tomadas en este momento no son definitivas, pero son las que guiarán el resto del proceso de aquí en adelante por lo que es importante no subestimar esta etapa ni querer pasarla demasiado rápido para no correr el riesgo de tener que regresar.

Anteproyecto

Con la decisión tomada, se continúa desarrollando la opción elegida para darle a cada elemento medidas y características cercanas a las definitivas, acotando las abstracciones del croquis a la realidades técnicas y legales que limitan todas las obras.
La documentación entregada por el equipo de diseño a sus clientes debe ser la suficiente como para poder presupuestar aproximadamente los trabajos y materiales, sabiendo que aunque durante una obra las sorpresas e imprevistos siempre existen, hay herramientas para intentar reducirlas al mínimo. Habitualmente la documentación de Anteproyecto con el agregado de un cálculo estructural y un plano de instalaciones es utilizada para iniciar los trámites municipales necesarios para comenzar la obra, algo que dependiendo del distrito puede tardar varias semanas antes de recibir la aprobación definitiva, tiempo que el equipo de diseño puede aprovechar para avanzar con la última etapa.

Proyecto

La etapa final del proceso, también llamada Documentación Ejecutiva o Documentación de Obra, es justamente todo el material gráfico y de cálculo necesario para que una empresa constructora pueda materializar con precisión las ideas proyectadas. El pliego conformado por este material forma parte del contrato y establece las condiciones que la jefatura de obra se compromete a cumplir y que la Dirección de Obra tiene derecho a exigir, desde las medidas generales de la obra hasta el tipo, color o marca de los revestimientos pretendidos. Por este motivo, para evitar problemas y discusiones durante la obra es imprescindible que esta documentación sea confeccionada con responsabilidad y cuidado.